domingo, julio 15, 2007

Podrido de los términos del intercambio

"Palos porque bogas, o palos porque no bogas", o "A estos no hay choclo que les venga bien", sería la mejor forma de describir el efecto de "Los términos del intercambio" en la constelación de economistas agrofóbicos que abundan en la Ciudad Autónoma.
La proclamada tendencia secular de deterioro de los términos del intercambio, hace mucho que viene dando pasto a los Ferrer y otros, proclamando que, en vez de apoyar a un sector supuestamente condenado al retroceso, hay que desangrarlo en beneficio del resto de la economía, antes de que la maldición bíblica del DTI lo liquide.
Por otro lado, cuando parece que la tendencia se revierte, otros se alarman por el impacto de los aumentos de los costos de alimentación en el habitante de las grandes urbes.
O sea que tanto porque se deterioran, como porque mejoran, los "términos del intercambio" constituyen la muletilla para la angurria de los agrofóbicos de las grandes ciudades por apropiarse de los recursos(crecientes o decrecientes) que genera el agro aregntino. Y a pesar de haber buscado, no encuentro referencias de que en otras latitudes se repita el mismo fenómeno.
No voy a hablar del otro término de la ecuación (el difuso denominador que esta del otro lado de los productos agrícolas), sinó del precio de estos productos, y las relaciones que lo fijan.
Todo precio se compone de relaciones de oferta y demanda. Por el lado de la oferta vemos en este informe de la FAO los aumentos anuales de distintos componentes en los últimos 15 años(1990-2005, antes de los biocombustibles):
Población Mundial: 1.4%
Producción de alimentos: 2%
Producción per capita: 0.9%
Cereales básicos: 1%
Oleaginosas:4%
Carnes: 2,7%
Frutas y hortalizas: 3.8%
Todo esto se produce mientras desciende levemente la superficie global dedicada a la agricultura y ganadería, o sea que todo es resultado del cambio tecnológico.
Obviamente es la demanda la que modela la oferta relativa de los distintos productos, y la tendencia parece ser consumir menos cereales básicos, y consumir más productos "sofisticados"(carne, verduras, aceites), producto de que una creciente proporción de la población mundial(sobre todo en China),aumenta sus ingresos.
Como el cambio tecnológico significa un aumento anual en la producción per capita, para que los precios agrícolas no se destruyan siempre fue indispensable este cambio cualitativo en la demanda hacia productos más ineficientes en términos energéticos (carnes y aceites). Si todos fuéramos eficientes y solidarios y comiéramos solo cereales y legumbres, seríamos más sanos y habría menos hambre pero la superproducción mundial sería astronómica. Pero sucede que cada vez más gente en países en vías de desarrollo se urbaniza, aumenta sus ingresos y cambia su dieta.
Es en este contexto que los biocombustibles le agregan un "boost" a la demanda, lo que obviamente hace subir los precios. E incide sobre el maíz(consumido más por animales que por humanos)y los aceites. Será estructural, será transitorio?
Es dificil decirlo, pero los economistas argentinos agrofóbicos siempre encontrarán en cualquier escenario un pretexto para justificar la transferencia y apropiación de lo que el agro argentino genera.
Por eso estoy podrido de los términos del intercambio.

3 comentarios:

ayjblog dijo...

Mariano
tenes razon, pero no le eches la culpa a la maldad lo q podes explicar por incompentencia

BTW yo me crie escuchando a los paperos quejarse y construir, quejarse y construir, que queres que te diga, me parece bien que ganen, excelente, pero, siempre les iba de mal a pesimo, y vos, como habitante de MdP sabes exactamente que eran iguales que los pescadores
o no?
ya se que las cosas no son iguales que en los 60/70s pero en la gente queda esa imagen, al menos en mi quedo, por eso cuando leo quejas, lo primero que me viene a la mente es eso, despues lo analizo, dentro de lo poco que se del tema

saludos

Anónimo dijo...

Mariano!! leiste el Pagina 12?, ya sos famoso!!!

Anónimo dijo...

Que sabes de patria y chacarera?